Mi último dia
El titulo de esta entrada, viene hoy a determinar mi conducta cotidiana. ¡Que bello es vivir!. Esto de vivir cada día como si fuera el último, constituye en sí mismo todo un reto y una proeza genial si de verdad se siente durante las horas del mismo. Cada día nos amanece nuevo y cada nuevo comienzo nos presenta unas nuevas oportunidades. ¿Pero es posible mantener esta dinámica actitud durante las horas siguientes?. Aquí es donde comienza a tomar cuerpo este escrito, que tienes delante querido lector. Es verdad que hoy en pleno siglo XXI esta pregunta nos parece tonta y la respuesta es bien sencilla. ¡voy al trabajo! ¿verdad? Al menos para la mayoría, pues en el día de hoy cada uno se gana las habichuelas con un trabajo ¿no? pues el mundo moderno así lo exige con su manera de existir y de ser. Salvo aquellos que por una situación particular se dedican a la contemplación y a la oración. Estos estan más cerca de conseguirlo debido al apartamiento de la gran masa. Y